Los besos son importantes. Los besos son maravillosos. Los besos son imprescindibles en tu vida.
Besar es un acto de amor.
Besa con cariño a los niños que hay en tu vida. Besa sus caras inocentes. Bésalos porque ellos siempre lo merecen. Y ellos son nuestros mayores maestros, porque nos enseñan el arte de vivir el momento presente.
Besa a tus padres con orgullo. Orgullo por tenerlos. Dejando al lado las diferencias. Agradeciéndoles lo mejor que te han dado, que es estar vivo y estar aquí, en este mundo. Mundo que, aunque a veces loco, también es digno de ser experimentado y, por supuesto, amado.
Besa a tus amigos, porque ellos siempre te aceptan como eres, sin juzgarte, al igual que tú a ellos. Y esto es motivo de celebración. Bésalos simplemente por ser como son.
Besa a tu pareja, amor o amante. Bésalo de forma apasionada. Bésalo a todo él a toda ella. Bésalo en los lugares más recónditos, con la pasión más desbocada. Con la unión y la confianza
que os une, porque los besos también son un encuentro íntimo y sagrado.
Besa a tus queridas mascotas, porque ellas nos hacen recordar que formamos parte de un planeta que, en verdad, es un paraíso, y que todos tenemos cabida en él.
Besa a tus ancianos abuelos, si aún tienes la suerte de poderlos disfrutar y, si no, mándales besos desde tu corazón. Seguro que, de alguna forma, les llegan. Porque ellos son un manantial de enseñanzas y, a veces quedan relegados injustamente en el olvido.
Cuando pase la pandemia, corre a besarlos a todos, porque demostrar nuestro amor y afecto
es de lo más importante, lo que nos hace personas, lo que nos recuerda que estamos vivos,
y que nos tenemos los unos a los otros.
Besa con amor. Besa con pasión. Besa sinceramente. Besa sin pensar y sin motivo.
Besa desde la emoción. Besa desde el corazón. Besa por siempre jamás. Besa.